Internet está revolucionando los procesos de captación de clientes para los abogados. Cada día son más los clientes que buscan abogado por Internet, y con ello crece la ventana de oportunidad para aquellos abogados y despachos que estén dispuestos a innovar. Aunque pueda parecerlo, no es necesario ser un experto en marketing digital para beneficiarte de las ventajas que te proporciona Internet a la hora de captar clientes.
Para simplificarte la tarea hemos creado este diccionario donde definimos algunos de los términos más importantes que debes conocer:
Términos de marketing digital para abogados
Lead
Este término es uno de los más importantes, y lo usaremos a menudo en nuestros artículos. Un lead no es otra cosa que un cliente potencial que te ha dejado sus datos de contacto o ha contactado contigo y que tienes la oportunidad de convertir en un cliente real.
Un ejemplo muy sencillo para explicar este concepto es el de un visitante que entra en la web de tu despacho de abogados, y rellena el formulario de contacto con una consulta o solicitud de presupuesto, o contacta directamente con nosotros.
No hay que confundir los conceptos de lead y cliente. Al final, un lead es una persona o empresa que ha mostrado un cierto interés en nuestro producto o servicio y ha solicitado información al respecto, pero que no necesariamente se va a convertir en un cliente.
Embudo de conversión
El embudo de conversión (o funnel de conversión) es un término habitual en el marketing digital que ayuda a visualizar gráficamente el proceso de conversión de un visitante en cliente.

En el nivel superior del embudo de conversión se coloca el primer segmento de clientes potenciales, y en la parte inferior los clientes convertidos. El embudo puede tener un número variable de pasos, pero en este ejemplo hemos utilizado solo tres para hacerlo más sencillo. Cada nivel es más estrecho que el anterior, dado que hay clientes potenciales que no cumplen el objetivo que marca el paso de un nivel al siguiente y se pierden por el camino.
En el ejemplo de la imagen, tendríamos el embudo de conversión para visualizar la conversión de visitantes de la página web de un despacho de abogados en clientes. En el primer nivel, en color rojo, tendríamos el conjunto de todos los visitantes que llegan a la página web. Posteriormente, en amarillo, tendríamos los leads, es decir, los clientes potenciales que han mostrado interés en los servicios del despacho. Como obviamente no todos los visitantes se convierten en leads, este nivel se representa más estrecho que el anterior. Por último, tendríamos en tercer lugar los clientes. Nuevamente este tercer nivel es más estrecho que el anterior porque solo algunos de los leads se convertirán en clientes finales del despacho.
Tasa de conversión
La tasa de conversión hace referencia al porcentaje de clientes potenciales que pasan de un estado del proceso de captación a otro. Dicho de otra forma, el porcentaje de veces que se cumple un objetivo marcado para los clientes potenciales.
En general, y cuando no se especifique nada más concreto, nos referiremos por tasa de conversión al porcentaje de visitantes que recibe la web del abogado y que posteriormente se convierten en leads. En este contexto, una tasa de conversión del 5% implicaría que de cada 100 visitantes que recibe la web de un abogado, 5 se convierten en leads (dejan sus datos de contacto o contactan con el despacho).
También se puede aplicar la tasa de conversión directamente a clientes finales. Siguiendo con el ejemplo anterior, si convenciéramos al 50% de los leads captados para convertirse en clientes (tasa de conversión del 50% de lead a cliente), nuestra página web tendría una tasa de conversión de visitante a cliente del 2,5% (100 * 5/100 * 50/100).
La tasa de conversión puede aplicarse tanto al sitio web por completo, como a páginas individuales de la web. Por ejemplo, si el 15% de los visitantes que llegan a tu página de «contacto» contactan contigo, podríamos decir que esa página de tu sitio web tiene una tasa de conversión del 15%. Es decir, 15 de cada 100 visitantes de esa página llevarían a cabo la acción que hemos marcado como objetivo (contactar con nosotros).
Términos de SEO para abogados
SEO
SEO son las siglas de Search Engine Optimization, optimización para motores de búsqueda en castellano, y mejor traducido por posicionamiento en buscadores. El SEO es una estrategia básica para la captación de clientes de cualquier despacho de abogados, ya que permite posicionar la web de forma orgánica (y por lo tanto gratuita) en los diferentes buscadores de Internet (Google, Yahoo, Bing…).
Es un factor crítico a la hora de conseguir clientes, ya que cuanto mejor posicionada esté tu web (es decir, más arriba aparezca en los resultados de búsqueda), más visitantes recibirá y más clientes potencialmente generará. Es una estrategia a medio y largo plazo y requiere de la aplicación de diferentes técnicas para sobrepasar a tu competencia.
Si quieres saber más sobre el tema, te recomendamos leer nuestra guía sobre SEO para abogados.
Palabras clave o keywords
En SEO, una palabra clave o keyword es un conjunto de una o varias palabras que representa la intención de búsqueda de un usuario que queremos que visite nuestra web. Dicho de otra forma, una palabra clave es aquello que esperamos que escriba un usuario en el buscador y encuentre nuestra página web.
Para el caso de un abogado de familia en Madrid, algunas palabras clave a modo de ejemplo serían: «abogados de familia en Madrid», «abogados de divorcios en Madrid» o «redacción de convenio regulador en Madrid». No serían palabras clave para este ejemplo «abogados de familia en Barcelona» ni «abogados mercantiles en Madrid», dado que no representan intenciones de búsqueda interesantes para generar clientes potenciales.
Linkbuilding
El linkbuilding, literalmente traducido como construcción de enlaces, es una estrategia SEO orientada a generar enlaces a una página web desde otras páginas web.
Tradicionalmente los enlaces ha sido uno de los factores más determinantes a la hora de conseguir un buen posicionamiento SEO para las páginas web. Esto es así porque Google entiende que cuantas más webs enlacen a una página web, dicha página web será más importante. Aunque hay cientos de factores que influyen en el posicionamiento SEO, el número y calidad de enlaces entrantes (también conocidos por su término en inglés backlinks) es uno de los más importantes.
Dada la relevancia que tienen los enlaces para el posicionamiento existe un conjunto completo de estrategias y técnicas para conseguir enlaces y mejorar el posicionamiento SEO. A esto le llamamos linkbuilding.
Otras definiciones
SEM
SEM son las siglas de Search Engine Marketing, marketing para motores de búsqueda traducido literalmente en castellano. No debe confundirse con el SEO, ya que a diferencia de este, el SEM generará tráfico de pago. Mientras que el SEO te generará visitas gratuitas pero necesitará de tiempo para posicionar tu web correctamente, el SEM genera resultados inmediatos, ya que aparecerás en los anuncios de los buscadores siempre que pagues por cada click más que los competidores que quieren aparecer en las mismas búsquedas.
En España y América Latina, SEM es prácticamente sinónimo de Google Adwords debido a la supremacía de Google sobre el resto de buscadores. El SEM es una parte muy técnica del marketing digital y no está al alcance de cualquiera, siendo bastante complicado rentabilizar la inversión si no cuentas con conocimientos avanzados en sectores donde hay mucha competencia, como es el caso de los abogados.
Si quieres saber más al respecto, te recomendamos nuestra guía: Google Adwords para abogados, ¿ayuda a conseguir clientes?.
Web responsive
Decimos que una web es responsive cuando su diseño se adapta y visualiza correctamente en cualquier dispositivo, es decir, el contenido de la web se adapta al ancho de la pantalla y en función de lo grande o pequeña que sea esta, se muestra de una forma u otra.
Es un término que ha cobrado especial relevancia en los últimos años, ya que con la masificación de smartphones y tablets, la variedad de tamaños de las pantallas de los dispositivos se ha vuelto enorme y ya no basta con diseñar una web que se vea bien solo para ordenadores.
Si la web de tu despacho de abogados no es responsive, deberías poner como prioridad número uno convertirla en responsive o sustituirla por una nueva. Los usuarios cada día navegan más por móvil y menos desde un ordenador, y si llegan a tu web y no se visualiza correctamente desde su dispositivo, abandonarán la página y disminuirán enormemente tus opciones de captación.
Responsive es un anglicismo que a veces se traduce por diseño adaptativo, diseño adaptable o incluso diseño responsivo, no obstante el término se suele utilizar en su versión original.
Si quieres saber más sobre temas relacionados con webs de abogados, te recomendamos nuestro artículo: Todo lo que tienes que saber para la web de tu despacho de abogados.
Artículo en construcción.